Maximiliano P Garcia's Obituary
Maximiliano García, devoto esposo, padre y siervo de Jehová, falleció el 8 de marzo de 2025. Nacido el 12 de octubre de 1935 en Sonora, México, Max fue el séptimo hijo de Ángela Palomino y Guadalupe García.
Criado en un pequeño pueblo minero, Max desarrolló una sólida ética de trabajo y una pasión por contar historias. A menudo compartía vívidas historias de sus aventuras infantiles, incluyendo sus viajes al pueblo a comprar café para su madre a la tierna edad de siete años.
La vida de Max estuvo marcada por su inquebrantable compromiso con su familia y su fe. En 1954, se casó con Lucille Ramírez y juntos tuvieron nueve hijos. A pesar de enfrentar la devastadora pérdida de dos hijos, María de Jesús en 1965 y Maximiliano García en 2020, la fe y la resiliencia de Max no hicieron más que fortalecerse.
A principios de la década de 1970, Max emprendió un camino espiritual, estudiando la Biblia y dedicando su vida a Jehová. Su ministerio impactó innumerables vidas, inspirando a muchos a adoptar principios y valores bíblicos.
A Max le sobreviven su esposa, Sofía Salvador García; sus hijos, Lucía, Martha, Keren, Cecilia, Rogelio, Ricardo, Enrique y Norma; 17 nietos; y 21 bisnietos. Su legado de amor, fe y devoción será profundamente extrañado por todos quienes lo conocieron.
Maximiliano Garcia, a devoted husband, father, and servant of Jehovah, passed away on March 08, 2025. Born on October 12, 1935, in Sonora, Mexico, Max was the seventh child of Angela Palomino and Guadalupe Garcia.
Growing up in a small mining town, Max developed a strong work ethic and a passion for storytelling. He often shared vivid tales of his childhood adventures, including his travels to town to buy coffee for his mother at the tender age of seven.
Max's life was marked by his unwavering commitment to his family and his faith. In 1954, he married Lucille Ramirez, and together they had nine children. Despite facing the devastating loss of two children, Maria de Jesus in 1965 and Maximiliano Garcia in 2020, Max's faith and resilience only deepened.
In the early 1970s, Max embarked on a spiritual journey, studying the Bible and dedicating his life to Jehovah. His ministry touched countless lives, inspiring many to adopt biblical principles and values.
Max is survived by his wife, Sofia Salvador Garcia; his children, Lucia, Martha, Keren, Cecilia, Rogelio, Ricardo, Enrique, and Norma; 17 grandchildren; and 21 great-grandchildren.
His legacy of love, faith, and devotion will be deeply missed by all who knew him.
What’s your fondest memory of Maximiliano?
What’s a lesson you learned from Maximiliano?
Share a story where Maximiliano's kindness touched your heart.
Describe a day with Maximiliano you’ll never forget.
How did Maximiliano make you smile?

